Advertencia

Cuando se hace una advertencia, se le informa a alguien que existe algún tipo de peligro y se deben tomar medidas que prevengan situaciones difíciles o que pongan en riesgo la integridad de alguna persona.

Cuando se habla de una advertencia en el ámbito de los bienes raíces se hace referencia a ciertas notificaciones. Estas pueden hacerse a un arrendatario o a un comprador para advertirlo de una serie de limitaciones que tiene la propiedad o problemas que pueden interferir con la comodidad o seguridad de sus habitantes.

Mediante una advertencia se pueden informar de problemáticas comunes como humedad, algunos problemas con la estructura de la propiedad o posibles restricciones legales. Al notificar acerca de estas situaciones, el arrendatario o comprador puede tomar mejores decisiones.

Con la advertencia hecha, la persona interesada en el inmueble puede contrastar mejor sus opciones de vivienda. Se le permite decidir con la información necesaria y aceptar los riesgos o incomodidades que esto pueda representar para sí mismo o su familia.

Este tipo de problemáticas deben quedar por escrito dentro del contrato de arrendamiento o de venta de la propiedad. Esto, afecta el precio del inmueble, ya que en muchos casos es necesario hacer reparaciones o tomar algunas medidas adicionales para reducir los riesgos.