Plazo

El plazo es un tiempo que se define para realizar alguna acción o cumplir con algún tipo de acuerdo. Cuando se establece un plazo en el contexto de los bienes raíces, se puede hacer para determinar una fecha exacta en la cual se debe cumplir con alguna obligación dentro de un contrato.

Existen diversos tipos de contratos como el de arrendamiento, el de venta o el celebrado al solicitar un crédito hipotecario. Cada uno de estos documentos cuenta con plazos distintos según el acuerdo comercial que se lleve a cabo y los intereses o necesidades de las partes involucradas.

En el caso de un contrato para el arriendo de un inmueble, el plazo más común es de un año. Durante este tiempo, las condiciones que se establecen dentro del documento tienen validez y su incumplimiento puede tener consecuencias legales y sanciones.

Los contratos de un crédito inmobiliario tienen plazos mucho más largos que pueden llegar hasta los 30 años. Durante este tiempo se tienen algunas obligaciones con la entidad bancaria como el pago de un monto determinado y sus intereses mensuales.

Y en el caso de los contratos de compra, tienen plazos que pueden ser más cortos y que tienen que ver con una serie de condiciones que aseguran la inversión tanto del comprador, como del vendedor de la propiedad.