Uso

Las viviendas y otro tipo de inmuebles pueden tener diversas utilidades, según los acuerdos que establezca el propietario con personas externas. En este caso, el término “uso” se refiere a ese derecho que se le concede a una persona en particular para utilizar determinado inmueble.

El uso en el contexto del mercado de los Bienes Raíces dentro de México, se puede dar de manera temporal y con ciertas limitaciones. Aquí se habla de la utilidad que puede darle una persona que no es propietaria a un inmueble gracias al permiso que le concede el dueño de esta propiedad.

El derecho sobre este bien particular se puede establecer a través de un contrato en el que se definan las utilidades y deberes que tiene el beneficiario de este. El contrato puede ser de comodato o de arrendamiento y en este se determinan los tiempos, cobros y las particularidades que deban ser definidas para evitar inconvenientes dentro de este acuerdo.

El uso que se le da a una propiedad se puede dar de forma exclusiva o compartida. Además, es común que se defina si se incluye el uso de ciertas áreas comunes del inmueble o si estas quedan fuera del contrato. En caso de que no se encuentren incluidas, se puede hablar de la posibilidad de acceder a estas con un pago adicional o no.